Reviews: Iron-man; Iron-man 2; Iron-man: Extremis

En este post voy a dedicarme a analisar con más o menos ganas las dos películas del director John Favreau y el comic de Warren Ellis en el que se inspiraran para hacer dichos filmes. Otra vez las críticas la caretean de objetivas pero esta vez como que se esfuerzan un poco más, mención aparte por que Emiliy Blunt está muchisimo más caliente que Scarlett Johansson y hubiese sido mucho más copado verla haciendo de Black Widow, además es británica, pero bueno.

Iron-man



El revuelo que provocó Iron-man haya por el 2008 debe gran parte a la chispa de Downey Jr. que explotaba en cada uno de sus verborragicos comentarios. Esta chispa al mimo tiempo hacía combustión en los cruces entre el protagonista y Gwyneth Paltrow. Por si eso era poco, a esta fuerza actoral se sumaba nada menos que Jeff Bridges, la maquinaria funcionaba mejor con un villano a-la malo traidor pero jugado por un actor "cara de bueno", que además demuestra disfrutrar cada instancia de su rol. Más allá de la potencia actoral, Iron-man funcionaba por diálogos afilados y un relato fuerte con guión de hierro, más de hierro que nunca, donde la acción entregada en dosis moderadas se encontraba sublevada a la trama.

Iron-man 2



En la secuela el cambio de estilo es apenas sensible. Al ramificar la trama se pierde el peso de Tony Stark haciendo de Tony Stark, (esto es, en el sentido de Tony actuando de tal manera en público y de tal manera en privado) en función a la explotación de las demás figuras que componen el relato. Esto no está mal porque las demás elecciones de cast son más que correctas, en partícular el villano que compone Mikey Rourke quien merece parrafo aparte. La suma de personajes es apropiada solo en cuanto se los sepa tratar como algo más que adornos del entorno del protagonista, y en éste sentido el director hace un gran trabajo al dotar a cada uno de ellos de una personalidad unica y bien expuesta.
La historia y las subs-tramas pueden pecar de ser un poco más exageradas que en la precuela, a seguir:
- Se nota más el drama serio en la enfermedad de Tony y en la perdida de confianza de él en el mismo. La escena de la borrachera y la pelea con Rhodes tiene una gran fuerza dramática.
- El drama de papá-no-me-quiere, a pesar de ser un tanto meloso se salva de caer en el ridículo más que nada por la velocidad en la que se autoresuelve, parece ser un parentesis en la película.
- El quiebre con Pepper es consecuente a la perdida de confianza y al alienamiento que ésta le provoca, con todo es tomado con el mejor humor que tan bien había enmarcado a la precuela y sirve de trampolín narrativo para que el filme avance.
- Descubrir un nuevo elemento... si, se fueron un poco al carajo pero tampoco se hace alarde de ésto, un detalle sobre el que no se construye ni destruye la trama general.
- El villano enmarcado en el feo, sucio y malo, compararlo con el Joker solo tiene sentido si se entiende que ninguno de los dos es convencional. Vanko actua verdaderamente movido por la venganza. Sin presentación, sin un trasfondo que explique más allá que el motivo, sin muchas palabras y sin una filosofía que le hagan caer en una ambigüedad moral, su accionar es tan sobrio y sincero que nada de lo que hace (o pueda llegar a hacer) nos sorprende, porque nada en él indica lo contrario.
Con todo, el estilo de la película es fiel a lo mostrado en la anterior y como secuela sirve más a modo de continuación, parecen ser más bien dos capítulos de la misma novela que dos volumenes separados.

Iron-man: Extremis



Extremis es una saga de seis números de Iron-man escrita por Warren Ellis e ilustrada por Adi Granov. Hay que saber que Warren Ellis es un tipo de muchas palabras pero pocas vueltas. En sus historias los personajes actuan de manera fría, más no despreocupada, ante las amenazas a las que se enfrentan. Son como personajes de un western, no le dan lugar al revuelo ni a las piñas gratis, de accionar práctico y directo. El comportamiento es de lo más adulto (por centrado, en particular comprandolo con el comic de superheroes tipo). Posee dialogos interesantes, no particularmente chistosos, pero si cargados de ideas y lo más importante: no tiene problema en mostrar que el protagonista está equivocado. Del dibujo mucho no puedo hablar porque no tengo idea, todo lo que puedo decir es que me gustó y es bastante sobrio y con mucha textura.
Hago referencia a éste comic porque en este se basaron Favreau y compañía para el guión de Iron-man. Extremis redefine el origen del personaje, lo situa un par de años antes de la guerra del Golfo, y muestra un Stark menos vivaz y playboy inclusive que en la película. Un tipo que todavía lucha contra la adicción al alcohol y con los fantasmas que le producen ser capo manufacturador de armas. Le asusta además que el traje de Iron-man sea lo unico que le da libertad realmente y que todas sus metas a futuro ronden alrededor de mejorar dicha armadura. La trama en sí sirve además para redifinir la relación entre Tony Stark y la armadura de Iron-man, dandole más poder al protagonista. Seis números de lectura atrapante con una trama sencilla, violenta y muy bien dialogada.



Y aquí está Emily Blunt. nada personal contra Scarlett pero aquí no hay nada que pueda hacer.